Se tiene planeado trabajar en la nueva convocatoria a inicios de2021para ingreso en agosto de 2021, pero ya se hará con otra perspectiva, pues se podrá ofertar como un programa perteneciente al PNPC.
La Maestría en Biomedicina que se ofrece en el Instituto de Investigación Científica «Roberto Rivera Damm» de la Universidad Juárez ingresó al PNPC a mediados de 2020, y a partir de ese momento los alumnos se volvieron candidatos para recibir una beca por parte del Conacyt, lo que facilita que se puedan dedicar de tiempo completo a sus estudios, según lo comentó el encargado de este programa de posgrado, Dr. José Manuel Salas Pacheco.
«En agosto de este año (2020)se inició formalmente con la segunda generación, la cual está cerrando el primer semestre, mientras que la primera generación, que comenzó en agosto del 2019,está concluyendo su tercer semestre y con ella se planea terminar en agosto del próximo año, completando así la primera generación con un total de cuatro alumnos, mientras que para esta generación se sumaron otros tres, recién ingresados. Es importante mencionar que el Conacyt actualmente limita el número de becas, por lo que tomando en cuenta este nuevo aspecto se debe realizar una planeación dentro de los programas, para que preferentemente ingresen los alumnos que puedan obtener beca y de esta manera puedan dedicarse de tiempo completo a esto», explicó.
Actualmente se tiene previsto que los siete alumnos pertenecientes a esta maestría cierren semestre en enero del 2021, esto debido a que las condiciones de trabajo que impuso la pandemia retrasaron el ingreso en agosto, como regularmente se hace, a septiembre, lo que provocó que se recorriera un poco el cierre del semestre a enero. Para el inicio del año 2021 se tiene planeado trabajar en la nueva convocatoria para ingreso en agosto, pero ya se podrá hacer con un cambio favorable, pues ya se ofertará como un programa que está dentro del PNPC y con la posibilidad de una beca.
Aseguró Salas Pacheco que «… con la creación de esta maestría se dio respuesta a una necesidad que viene de afuera hacia adentro de seguir ofertando nuevas opciones para que los chicos se sigan formando; tenemos egresos de alrededor de 600 o 700 alumnos al semestre en el área de ciencias de la salud, y en esta misma área sólo tenemos dos maestrías o quizá tres en el PNPC; de ellas, cada programa te permite que ingresen seis o siete alumnos, así que con esto nos damos una idea de la necesidad que existe. Por otra parte, para nosotros es un gran beneficio porque al final de cuentas estamos inmiscuidos en la investigación,
desarrollamos programas de investigación donde el gran sostén son los alumnos, ya sea de pregrado o posgrado y por supuesto que es mucho mejor tener un alumno que se pueda dedicar de tiempo completo y exclusivo a esto».
Explicó que esos son los grandes beneficios que les da tener programas dentro del PNPC, «… que los chicos tengan una beca que les permita dedicarse de manera exclusiva, desarrollar sus protocolos, mismos que salen de los proyectos de investigación que estamos realizando y es un ganar-ganar por todos lados, eso finalmente impacta en los indicadores, no sólo en los institucionales, sino también en los individuales para cuando nos evalúan en el SNI, las publicaciones, etc. El beneficio es para todos», concluyó.