Diversos colectivos provida y profamilia, vinculados a la Arquidiócesis de Durango, exigieron a la diputada local Delia Enríquez que compruebe sus afirmaciones de que estuvieron infiltrados en la manifestación del 8M que causó el incendio en el Congreso del Estado. María Eugenia Campos, representante de dichos grupos, enfatizó en conferencia de prensa que existe evidencia audiovisual de que el “Bloque Negro” de los colectivos feministas estuvieron al frente de dichos disturbios, que fueron arengados por una mujer con megáfono y que en cuanto se generó el incendio fueron llamadas para incorporarse al contingente en la Plaza IV Centenario.
A la par, Campos Zavala expuso que quien hace acusaciones de esta tipo está obligado a probarlo. Mientras que Víctor Joel Martínez, representante de los grupos laicos de Durango, exigió a la diputada Delia Enríquez que presentara dichas pruebas o que se desdiga de sus acusaciones; de lo contrario, analizarían emprender acciones legales en su contra.
