Este 7 de febrero el Instituto Municipal del Arte y la Cultura (IMAC), conmemora el 157 aniversario de Ricardo Castro, considerado el último romántico del porfiriato, recordado por obras como, el “Vals Capricho”, “Vals poético” y su ópera “Atzimba”. A través de estas líneas se recuerda su vida y obra.
· Ricardo Rafael de la Santísima Trinidad Castro Herrera, mejor conocido como Ricardo Castro, nació en el municipio de Nazas, Durango, el 7 de febrero de 1864, fue un pianista y compositor mexicano.
· Escribió el “Vals Capricho”, un famoso vals de concierto, que a la fecha sigue siendo repertorio obligado de los pianistas mexicanos.
· Fue miembro fundador de la Sociedad Anónima de conciertos en 1892 y de la Sociedad Filarmónica Mexicana, en 1895, creada para la difusión de la música de cámara. En 1900 estrenó su ópera “Atzimba”.
· Estudió en los conservatorios de París, Berlín, Londres, Bruselas, Roma, Milán y Leipzig. A su regreso, fue nombrado director del Conservatorio Nacional de Música.
· Algunas de sus obras más famosas, son sus óperas “La leyenda de Rudel”, “Don Juan de Austria”, “Satán Vencido” y “El Beso de la Roussalka”, también realizó unas brillantes y muy difíciles variaciones sobre el Himno Nacional Mexicano.
· En Durango, se construyó durante el porfiriato el teatro que fue bautizado en honor al pianista.
· Después de convertirse en Director del Conservatorio Nacional de Música, fallece por pulmonía el 28 de noviembre de 1907. Ricardo Castro es figura clave entre los pianistas de finales del siglo XIX y principios del XX.
